Buscar este blog

Powered By Blogger
Mostrando entradas con la etiqueta CRIPTOZOOLOGÍA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CRIPTOZOOLOGÍA. Mostrar todas las entradas

sábado, 28 de junio de 2014

¡VAMOS AL ZOOILÓGICO! (IV)

7) SERPIENTES, PULPOS Y OTROS MARISCOS GIGANTES (1° Parte)

“Aquellos que, para comerciar o pescar, navegan por las costas de Noruega, coinciden en el relato de una historia realmente admirable, la de una enorme serpiente de una longitud de más de 60 metros, y 6 metros de diámetro que vive en las rocas y agujeros cerca de la costa de Bergen; sólo sale de sus cavernas en las noches de verano y con buen tiempo, para devorar terneras, corderos y cerdos, o se sumerge en el mar para comer pulpos, langostas y todo tipo de cangrejos. Tiene una hilera de pelos de 60 cm de largo que le cuelgan del cuello, escamas afiladas de color oscuro, y ojos brillantes y llameantes. Ataca a los barcos, se levanta fuera del agua, se lleva a los hombres y los devora; y normalmente esto no ocurre sin que algo terrible acontezca en el reino, sin un cambio próximo: o los príncipes van a morir o serán exiliados, o una guerra va a estallar pronto." 

Olaus Magnus, arzobispo de Upsala, "Historia de gentibus septentrionalibus" (1555).

Si en los lagos y los ríos de nuestro querido planeta pueden llegar a esconderse extrañas criaturas aun no descubiertas por los zoólogos acreditados, los océanos que ocupan las tres cuartas partes del mismo podrían ser considerados como auténticos paradigmas para la probable existencia de críptidos que se creían extintos, producto de leyendas locales o totalmente ignorados por la ciencia.

Muchos han dicho que el ser humano sabe más sobre la Luna que lo que se esconde bajo la superficie de los mares. La inmensa cantidad de metros cúbicos que estos ocupan y sus vastas profundidades, que incluso llegan a alcanzar los 12.000 metros, bien pueden guardar uno que otro secreto y es posible que aun puedan ser hallados muchos animales que todavía no han sido estudiados... o ni tan siquiera pensados.

La prueba viviente de esas teorías se remonta al 22 de diciembre de 1938, cuando en las costas africanas fue capturado un pez conocido como Celacanto (Latimeria chalumnae), el cual se creía totalmente extinto desde hacía varios millones de años. 
-CELACANTO-
Es gracias a este notable fósil viviente que los criptozoólogos se atreven a disertar sobre la existencia de gran cantidad de críptidos marinos a lo largo de todos los océanos del mundo y es así como continúan con la ardua búsqueda de lo que ellos consideran una incuestionable realidad.
-RESTOS DE UNA CRIATURA ENCONTRADA EN
COSTAS DE NUEVA ZELANDA-

¿Son reales los cuentos sobre serpientes marinas y pulpos gigantes?

¿Es posible que hayan sobrevivido criaturas de tiempos prehistóricos que se creían extintos?

¿Podrían quizá tratarse de algún tipo de animal ya conocido que, bajo ciertas circunstancias inadecuadas, haya sido confundido con un críptido?

Nadie lo sabe a ciencia cierta, ni tan siquiera los sesudos y serios científicos que tratan de otorgarle cierta sensatez a dichos avistamientos. 

Si queremos develar este misterio, es hora de que nos embarquemos en nuestro navío imaginario y nos lancemos, viento en popa, hacia los oscuros océanos en busca de la verdad.

-SERPIENTES MARINAS

Las historias sobre las serpientes de mar son tan antiguas como la navegación, llegando incluso a ser representadas en algunas herramientas de la edad de bronce, es muy probable que las criaturas bíblicas conocidas como Leviatan Behemot sean las menciones más tempranas que se encuentran sobre dichas criaturas.
-MANUSCRITO DEL SIGLO XVIII: THOR
E HYMIR LUCHANDO CONTRA
LA SERPIENTE  MIDGARD-


La Edda (1) del poeta islandés Snorri Sturluson (1179-1241) también menciona a la serpiente con el nombre de Midgard, la cual se enfrenta al dios Thor en el punto culmine del Ragnarök.

En el siglo IV A.C., el filósofo y científico griego Aristóteles (384-322 A.C.) ya hablaba sobre la presencia de una gran serpiente marina en las costas de Libia, la cual había atacado una embarcación a la cual hizo naufragar.

En tiempos más recientes, más precisamente en 1555, el arzobispo de Upsala (Suecia) Olaus Magnus describió a una serpiente marina que medía 60 metros de largo por 6 de diámetro. Su cuerpo era escamado de color negro y poseía una crin de pelos en el cuello. Según los relatos aparentemente era de naturaleza carnívora, alimentándose del ganado e incluso de algunos marineros distraídos (o lo suficientemente borrachos como para caerse por la borda).
-IMAGEN DE UNA SERPIENTE DE MAR DESCRITA EN "GENTIBUS
SEPTENTRIONABILUS" (1555)-
El primer avistamiento realizado en aguas del Atlántico norte, alejado de las costas escandinavas, data de 1639. El hecho fue mencionado en el libro An Account of Two Voyages to New England (1641), escrito por John Josselyn, en donde un barco pudo observar la presencia de una gran serpiente que los había acechado en una roca del cabo Ann. Al poco tiempo de dicha aparición, comenzaron a producirse gran cantidad de apariciones en las costas de Canadá, Maine, Massachusetts, Cooneticut, Nueva York y Maryland, extendiéndose hasta el siglo XIX.
-SERPIENTE MARINA DE CAPE ANN (1639)-

Uno de los casos más famosos sobre avistamientos de serpientes marinas sucedió en 1734, cuando en las costas de la Columbia Británica (más específicamente en la Bahia de Cadboro) una criatura marina a la que apodaron Caddy (2) fue visto deambulando por el lugar en más de 300 oportunidades. 

Según los testigos, se trataba de una criatura serpentiforme con cabeza de caballo o camello, patas delanteras en forma de aletas y traseras similares a la de una foca. En su lomo podía verse la presencia de escamas y una aleta dorsal.

Recién en 1752 se realizaría la primera descripción científica de una serpiente de mar en el libro Historia Natural de Noruega, escrito por el obispo Bergen Erik Ludvigsen Pontoppidan. El mismo daría a conocer al año siguiente, ante el tribunal de justicia de Bergen, una carta que fuera escrita por el capitán Lorenz von Ferry en la cual narraba el encuentro con una gran serpiente en las costas noruegas siete años atrás.
-SERPIENTE MARINA OBSERVADA POR HANS
EGEDE EN 1734-

Según la descripción, la misma tenía una cabeza similar a la de un caballo de color gris, grandes ojos y una larga melena de color blanco. Temerosos de que esa extraña bestia los atacara, se realizaron una serie de disparos sobre la misma, la cual terminó desapareciendo bajo la superficie del agua.

Otro de los casos más interesantes ocurrió en 1817, cuando en el puerto de Gloucester hizo su aparición una enorme serpiente de 30 metros de largo de color negro con vientre amarillento. La misma sería observada por numerosos testigos a lo largo de varios días.
-SERPIENTE MARINA DE GLOUCESTER (1817)-
Durante buena parte del siglo XIX, se produjeron numerosas observaciones por parte de barcos de todo tipo, los cuales iban desde simples botes pesqueros hasta buques de guerra e incluso la Linnaean Society se encargó de otorgarle un nombre científico a este elusivo animal: Scoliophis atlanticus.

Entre los muchos avistamientos realizados entre principios del siglo XIX y buena parte del XX podemos nombrar:-
-ARRIBA Y ABAJO IZQ.: SERPIENTE MARINA
OBSERVADA POR EL BUQUE DAEDALUS EN 1848-

-1808: unos pescadores atrapan un extraño animal en las islas Orcadas (Escocia) y es estudiado por un grupo de científicos que lo termina identificando como una nueva especie de tiburón.

-1820: el teniente de navio George Sandford, al mando del buque mercante Lady Combermere, observó una serpiente que medía entre 18 y 30 metros (¿una serpiente de goma?) que arrojaba un chorro de agua de manera similar al de una ballena.

-1830: el capitán y la tripulación del Eagle fue atacado por una criatura similar a un cocodrilo de unos 22 metros de largo, al cual le dispararon con un mosquete.

-1833: unos oficiales pertenecientes al ejército británico que habían salido de pesca (un buen motivo para tomarse algunos “tragitos” en honor al rey Guillermo IV) a Mahione Bay, situado a unos 65 km. al este de Halifax, tuvieron la oportunidad de ser testigos de la aparición de una serpiente de 24 metros de longitud.

-1848: el buque británico Daedalus que, bajo el mando del capitán Peter M´Quhae, iba con rumbo a la isla de Santa Helena se topó con una criatura de gran tamaño que asomaba su cabeza a 1.20 metros por encima de la superficie del agua. La misma tenía una especie de crin de pelos que recorría su lomo.

-1879: el mayor H. W. J. Senior, que viajaba por el golfo de Aden en el barco City of Baltimore, observó a unos 450 metros de distancia el veloz desplazamiento de un animal con cabeza de perro… para ser más precisos la de un Bulldog.

-1901: la tripulación del vapor Grangense, que navegaba por el Atlántico occidental, divisaron a un animal gigante similar a un cocodrilo con dientes de 15 centímetros de largo. La bitácora no menciona para nada este evento y, supuestamente, fue debido a que el capitán podrìa haber temido que lo tomaran por un loco o un borracho.
-SERPIENTE DE MAR OBSERVADA EN EL AÑO 1775-
-1905: el Valhalla, en el que viajaban los miembros de la Real Sociedad Británica de Zoología E. G. B. Meade-Waldo y Michael John Nicoll fueron testigos de la aparición de una extraña criatura. Según uno de los testigos del hecho: “Contemplé un enorme pez o una masa tremendamente irregular surgiendo del agua, de un color pardo oscuro parecido al de las algas marinas. Tendría una longitud de 1,80 metros y se elevaba sobre la superficie unos 60 centímetros. Pude ver bajo el agua, detrás de la masa informe, la sombra de un cuerpo de considerable tamaño. Delante, surgieron una cabeza y un cuello enormes. Este sería del grosor de un cuerpo humano; aquélla, por su forma y por sus ojos, se asemejaba a la de una tortuga. Llegué a ver la línea de la boca, pero el barco proseguía su derrota y cada vez nos alejábamos más. La bestia movió el cuello a ambos lados de modo peculiar; la cabeza y el cuello eran de color pardo oscuro por arriba y blancuzco por debajo”
-FOTOGRAFÌA TOMADA EN 1964 POR
ROBERT LE SERREC-

-1934: en las playas de Querqueville (Normandía) apareció muerta una extraña criatura de casi 8 metros de longitud. Al ser examinada por dos científicos pertenecientes al museo historia natural del lugar, estos determinaron que se trataba de una especie desconocida.

-1964: el fotógrafo francés Robert Le Serrec retrató, en las costas de Queensland (Australia) una criatura similar a un renacuajo que medía 24 metros de longitud, el cual parecía estar herido. También fueron testigos su familia y un amigo. Debido a su condición de conocido contrabandista, este testimonio fotográfico fue totalmente desacreditado.

1966: el capitán John Ridway, que estaba cruzando el Atlántico en un bote de remos junto al sargento Chay Blyth, vio durante la noche una serpiente marina fosforescente de unos 10 metros de longitud que se acercó al bote antes de desaparecer bajo las aguas. Al estar totalmente dormido, su compañero no pudo aseverar este testimonio.

-1976: un pescador llamado Keith Ross y su hijo fueron perseguidos por un animal de naturaleza desconocida cuya cabeza se elevaba 3 metros por encima del agua.

-1997: el criptozoologo Paul LeBlond citó el avistamiento de un monstruo marino, por parte de un amigo, en las costas del mar de Terranova. Al principio los pescadores creyeron que se trataban de bolsas de basura pero, cuando fueron a investigar, de la misma se levantó una cabeza similar a la de un caballo.

-2009: los lugareños de la isla de Borneo citan la existencia de una criatura similar a un dragón y una serpiente de mar, a la cual le habían dado el nombre de Nabau.
Muchas teorías, científicas o no, se han encargado de explicar de una manera más o menos acertada la posible existencia de las serpientes marinas, en un intento de racionalizar tantos avistamientos producidos a lo largo de tantos años.

Luego de las investigaciones realizadas por el obispo Pontoppidan en 1753 sobre este tema tan controversial, el especialista en fauna marina Constantin-Samuel Rafinesque-Schmaltz realizó una disertación sobre las serpientes marinas y su parentesco con la serpiente marina listada (Pleamydrus platurus) que no llegaba a más de un metro y medio de longitud. Ello le valió el descrédito de sus colegas y la expulsión de la Universidad de Lexington ante lo errado de sus teorías.
-ILUSTRACION DEL SIGLO XVIII-

En 1866 Judge Sumner D. York escribió el libro conocido como La Serpiente de Mar de Cabo Ann, en donde explicaba su aparición en esa región debido a las condiciones alimentarias que imperaban en el mismo.

En un intento por explicar la existencia o no de la serpiente marina, el zoólogo holandés y director de la Real Sociedad Zoológica y Botánica de la Haya Antoon Cornelis Oudemans (1858-1943) publicó el libro The Great Sea-Serpent (1893), en el cual analizó 162 casos de avistamientos comprobados.

Durante la investigación, este especialista llegó a la conclusión de que probablemente se trataba de alguna especie de foca o algún tipo de pingüino con aspecto de plesiosaurio de 80 metros de longitud al cual bautizo con el nombre científico de Megophias megophias. Es de destacar que Oudemans descartó de manera conveniente todos aquellos casos en los cuales no existía ninguna coincidencia con su tan extraña hipótesis. Unos cuantos años más tarde, más precisamente en 1930, Rupert T. Gould agregó a esta bizarra lista otras dos posibilidades: una tortuga y un tritón gigante (una especie de anfibio). 

En 1965, el criptozoologo Bernard Heuvelmans realizó un estudio concienzudo sobre este gran misterio de los mares y escribió el libro Le Grand serpent-de-mer: le problème zoologique et sa solution. 

En el mismo realizó una exhaustiva investigación estadística de todos aquellos avistamientos producidos entre 1639 y 1965, llegando a la conclusión que los mismos eran diferentes tipos de animales ya conocidos como el calamar gigante (genero Architeuthis), el tiburón ballena (Rhincodon typus), el regaleco o pez remo (Regalecus glesne) que puede alcanzar hasta 17 metros de largo, el gusano nemertino gigante (Lineus longissimus) de hasta 60 metros de largo, cocodrilos marinos y tortugas, entre otros. Incluso se habló de una especie de renacuajo gigante de naturaleza desconocida que podría tener algún tipo de parentesco con los peces Celáceos como los tiburones y las rayas.

Con el tiempo, y los nuevos descubrimientos zoológicos, esta lista de criaturas fue aumentando. Entre ellas podemos nombrar al Pyrosoma, una colonia tubular de invertebrados tunicados que se unen entre si alcanzando varios metros de longitud y brillan en la oscuridad, y el cinturón de Venus (Cestus veneris) que llega a un metro y medio de longitud.
-REGALECO O PEZ REMO (BIEN PUEDE SER
CONFUNDIDO CON UNA SERPIENTE MARINA)-
A pesar de todas la explicaciones dadas al respecto, el misterio sobre las serpiente de mar aún continúa estando latente en la imaginería popular y, a pesar de las explicaciones científicas, se han elaborado numerosas teorías sobre la probable existencia de dicho animal. 

Hay quienes dicen que se tratan de los extintos reptiles marinos prehistóricos conocidos como Plesiosaurios, pero esta teoría choca con los mismos problemas generados sobre la existencia de Nessi y sus otros primos lacustres… sin ir más lejos, la inmensa brecha temporal existente entre la era mezozoica y nuestras épocas actuales.

Muchos de los testigos coinciden que las serpientes de mar observadas se desplazan por medio de ondulaciones verticales, un detalle que contradice totalmente el verdadero movimiento de este tipo de reptiles (3). La mayor parte de los investigadores serios lo describen como el desplazamiento propio de un grupo de delfines que, debido a la distancia en la que por lo general se encuentran los observadores, pueden llegar a ser confundidos.

Hay otras teorías, que considero bastante sensatas, en donde se explica que estas extraordinarias criaturas puedan haberse extinguido hacia mediados del siglo XX y ello explicaría la ausencia de observaciones en la actualidad. La misma me resulta bastante coherente ya que, probablemente, dentro de 200 años o más muchas personas creerán que el pájaro Dodo o el rinoceronte negro son parte de mitos y leyendas sin asidero científico alguno.
A pesar de todas las explicaciones coherentes, el misterio sobre la serpiente marina aún persiste, pero no es el único… ya que existen otros horrores que se esconden bajo la superficie del vasto océano.

NOTAS:

(1) Edda: colección de historias que se relacionan con la mitología nórdica. La misma está compuesta por dos compilaciones: la Edda prosaica (Edda menor o Edda de Snorri) y la Edda poética (Edda mayor o Edda de Saemund).


(2) Este monstruo marino, que ya era conocido por los aborígenes del lugar desde antes de la llegada de los colonizadores europeos, tuvo el dudoso honor de poseer el nombre científico de Cadbosaurus wilsi.

-PLEAMYDRUS PLATURUS-

(3) En los océanos viven dos tipos de serpientes marinas que han sido clasificadas por los zoólogos: la Laticauda colubrina, que vive en las costas australiana, el mar de China y el golfo de Bengala, y Pleamydrus platurus, distribuida en todo el océano Pacífico. Ambas no superan el metro y medio de longitud y se caracterizan por ser sumamente venenosas (¡Mamita querida!).


jueves, 27 de febrero de 2014

VAMOS A ZOOILÓGICO (2)

3) UN MISTERIO CON MUCHO OLOR A WHISKY

“El caso de este monstruo es digno de consideración, aunque solo sea por cuanto ofrecen un ejemplo sorprendente de alucinación colectiva. Durante siglos se han conocido leyendas en torno a esta vía fluvial. Quien posea el más ligero conocimiento de la naturaleza humana, no hallará dificultad en comprender como un animal, visto antes por contadísimas personas, al poco tiempo se ha mostrado a muchas más”


E. G. Boulenger
Director del Acuario de Londres –1933-

1871: D. McKenzie observa la presencia de una criatura que se desliza con rapidez sobre la superficie del lago Loch Ness, localizado en las altas tierras de Escocia.

1868: el diario Inverness Courier describe la presencia de un enorme pez que parece habitar dicho lago.

1880: un buzo llamado Mc Donald tropezó con una misteriosa criatura, cuando trataba de recuperar un bote hundido.

1885: Roderick Matheson describió algo de gran tamaño de cuello largo y una crin similar a la de un caballo.

1930: el Northern Chronicle publicó la noticia de que unos pescadores habían visto un gran animal que produjo remolinos en el agua.
-MAPA DEL LAGO NESS-

1932: K. MacDonald (que no era dueño de una empresa de comidas rápidas) informó sobre el avistamiento de una criatura similar a un cocodrilo.

14 de abril de 1933: el señor y la señora McKay informan haber visto unas jorobas sobre la superficie del lago.

2 de mayo de 1933: George Spicer y su mujer, que regresaban de un viaje a Londres, observaron la presencia de un monstruo (tal fue el término usado por el diario local) que cruzó la carretera impulsándose con sus aletas y parecía llevar en su boca una presa de pequeño tamaño.

Con este último avistamiento se daría por iniciada de manera más o menos oficial la leyenda más famosa de las tierras escocesas: la del Monstruo del Lago Ness.

También conocido como Nessie por los amigos, se trataría de un críptido que, junto al Yeti y Pie Grande, se ha visto transformado en uno de los bichos más emblemáticos de la “ciencia” conocida como criptozoología.
-KELPIE-

La leyenda de esta criatura se remonta a las épocas precristianas, ya que muchos estudiosos del tema lo asocian con el mito escocés de los Kelpies, unos seres malignos con forma de caballo que arrastraban a sus incautas víctimas al agua para poder ahogarlas. 

La referencia escrita más antigua sobre este misterioso críptido data del año 565 DC, cuando San Columba salvó a una persona que había sido atacada por un monstruo, conocido con el nombre gaélico de Niseag, que vivía en el río y el lago Ness.

A lo largo de los años los informes sobre avistamientos en el lago fueron sucediéndose, pasando a formar parte de la tradición oral de esas tierras. Pero, recién en la década del 30, la misteriosa criatura lacustre llegaría a alcanzar la fama mundial de la cual hace gala actualmente.

Luego del artículo aparecido en el periódico Inverness Courier en mayo de 1933 sobre el avistamiento realizado por el matrimonio Spicer, los diarios londinenses levantaron la noticia y de inmediato fueron enviados periodistas a Escocia a fin obtener alguna prueba que comprobara la existencia del ahora popular Nessie, llegando a ofrecer incluso la suma de 20.000 libras esterlinas a quien pudiera capturarlo.


En abril del año siguiente, Kenneth Wilson, un cirujano afecto a la fotografía que se hallaba de vacaciones por las tierras escocesas, tomó unas instantáneas en donde podían verse a una criatura de cuello largo que se deslizaba a través del agua. Según lo contado por el médico, las mismas fueron tomadas desde una pendiente que se hallaba a unos sesenta metros por encima del lago. Como es de suponer, las sensacionales fotografías no tardaron en hacer su aparición en el Daily News de Londres y luego en todos los pasquines a lo largo de todo el mundo.
-ANATOMÍA DE UNA MENTIRA-
Lamentablemente, en 1994, un tal Marmaduke Wetherel se encargó de desacreditar este material que parecía tan concluyente, cuando afirmó haber participado en la falsificación de dichas fotografías cuando trabajaba para el periódico Daily Mail y que el nombre de Wilson había sido utilizado para darle más credibilidad al asunto.

Pero, en el momento en que estas fotografías fueron publicadas, se produjo un gran revuelo entre la opinión pública y esto llevaría al inicio de una vigilancia continua en el lago, una laboriosa tarea que sería financiada por un famoso magnate de los seguros conocido como Sir Edward Mountain. Según se cuenta, durante ese año fueron realizadas 17 observaciones confirmadas... 

¡Y bueno che, el que tiene plata compra lo que quiere, aunque huela a pescado podrido!

Durante ese mismo año se hizo conocido, para un reducido y selecto auditorio, una película en la que podía verse con todo detalle a nuestro querido Nessie. Desgraciadamente, esa cinta se perdió antes de que pudiera ser estudiada su autenticidad (¡Que in... conveniente!).

Las noticias sobre los avistamientos de Nessie desaparecieron totalmente de los titulares durante la segunda guerra mundial hasta que en 1957 la revista Harper´s Magazine recogió las declaraciones de un tal David Slorach, que 3 años atrás lo había vuelto a ver mientras conducía por una carretera costera. 

De forma inmediata la cadena BBC (que de rating se la sabe lunga) envió un equipo de televisión a la zona, el cual se hallaba provisto de lo más moderno en aparatos de detección sónica. Según se cuenta, el susodicho animal fue detectado por estos antecesores de José De Zer a unos 3 metros por debajo de la superficie, para luego desaparecer.

Pero la bomba sobre el tema no estallaría hasta 1960, cuando por fin Nessie se digno a dar su borrosa imagen ante las cámaras. 

El ingeniero aeronáutico Tim Dinsdale tuvo la fortuna de filmar al monstruo del lago Ness con una cámara de 18 mm. En la misma podía verse una criatura, de aproximadamente 18 metros de largo y cuyo lomo emergía 1 metro por encima del agua, que parecía moverse en zig-zag a unos 17 km/h. La Royal Air Force hizo un examen minucioso del film, llegando a la conclusión de que no se trataba de ningún truco y que resultaba evidente que había algo en el lago.

En 1970, el doctor Robert Rines (entre cuyos créditos figura el haber encontrado el Titanic) y la National Geographic Society organizaron una expedición con el fin de recabar pruebas definitivas sobre la existencia de Nessie.  El resultado final: dinero y tiempo mucho... monstruo nada.

A pesar de los resonantes fracasos, los infatigables creyentes y los valientes criptozoólogos no perdieron las esperanzas y miles de largavistas, cámaras y otros aparatos de última tecnología continuaron apuntando hacia las misteriosas aguas a la búsqueda de alguna señal que hiciera callar a los detractores de siempre. 
Dos años más tarde un grupo investigador, encabezado por un abogado estadounidense llamado Robert H. Rine, obtuvo una serie de fotografías subacuaticas, con una cámara a la que se le había adosado una luz de alta potencia, en donde se podía ver con poca claridad una aleta de forma romboidal. Sobre esta base bastante poco sólida, el naturalista ingles Sir Peter Scott le otorgó un nombre científico a Nessie... Nessiteras rhombopteryx

A pesar de todo esto, este material fue descartado tanto por los creyentes como los detractores ya que resulta demasiado evidente la manipulación que se hizo sobre las mismas, con el fin de ofrecer la imagen deseada. Cuando fueron observadas las fotos originales los especialistas llegaron a la conclusión de que correspondía al fondo del lago.

Quien más ha defendido la existencia de Nessie fue sin duda alguna Frank Searle. Este auténtico fan del tema viene observando desde 1965 el lago Ness e incluso cita que lo vio en 18 oportunidades, llegando incluso a fotografiarlo en numerosas oportunidades.

A pesar de las numerosas recompensas que han sido ofrecidas por su captura, que iban desde afamados zoológicos y museos hasta una destilería de whisky (¡Hic!) e incluso llegando a transformarse en un tema de debate en la Cámara de los Comunes en 1933 (¡!), la elusiva bestia lacustre a sabido permanecer estratégicamente apartada de la insaciable curiosidad humana.

El último avistamiento registrado de manera oficial data de junio de 1998, en donde varios testigos pudieron observar a una gran criatura de cola larga que permanecía semisumergida sobre la superficie del lago. Posteriormente, terminaría desapareciendo de las estadísticas oficiales y no tanto.

Se han postulado varias teorías que han tratado de explicar este inexplicable fenómeno. La más amada por los estudiosos del tema es la que trata sobre la existencia de un plesiosaurio, reptil prehistórico acuático extinguido a finales de la era Mezozoica, en las aguas del lago. Otras teorías nos hablan de un enorme esturión, burbujas causadas por actividad volcánica, tiburones de agua dulce e incluso la de unos supuestos elefantes escapados de un circo durante la década del 30…
-PLESIOSAURIO-

Se ve que el whisky pega fuerte por esas regiones.

El caso sobre la existencia o no del monstruo del lago Ness, por lo general alimentado por los habitantes del lugar con el fin de atraer a crédulos turistas, continúa aun envuelto en el más hermético misterio. A pesar de las nuevas tecnologías que han hecho su aparición en estos últimos años en lo que respecta a comunicaciones e imágenes, esta criatura permanece tenazmente sumido en el anonimato. 

¿Miedo a las cámaras? ¿Farsa mediática? Nadie lo sabe, pues al imaginario popular todavía le gusta aferrarse a la idea de que ese querible monstruito siga viviendo lo más campante en las oscuras y profundas aguas de su lago materno.

Pero no se pongan tristes queridos lectores pues, Como si todo lo contado fuera poco, Nessie no se encuentra solo en este cruel mundo moderno y son muchos los parientes lacustres que han sido vistos en otras tierras lejanas... incluso en nuestra sufrida República Argentina.

domingo, 29 de diciembre de 2013

¡¡VAMOS A ZOOILOGICO! (I)

“Todo estaría bien. Todo sería admirable, si los condenados quisieran seguir siendo condenados”
El Libro de los Condenados -Charles Fort

1) Introducción a la “Mostrología
-NAHUELITO-
Hubo un tiempo en que nuestro planeta era muy grande y misterioso. 

En esa inmensidad llena de desconocidas posibilidades, era muy factible creer en la existencia de seres tan increíbles como los dragones, las sirenas o las hadas, solo por nombrar algunas. 
-SERPIENTE MARINA DESCRITA EN EL LIBRO "HISTORY
OF THE NOTHERN DE OLAUS MAGNUS (1555)-

Fue así como miles de criaturas fantásticas fueron anotadas concienzudamente en inmensos "libracos científicos" por sesudos "científicos", en los cuales se describían con increíble veracidad la vida de animales que nunca existieron y, lamentablemente, nunca existirán.

Las exploraciones y el ansia de conocer todos los misterios, un defecto inherente a todo ser humano que se precie de tal, hicieron que este mundo se fuera haciendo cada vez más pequeño, transformándolo en algo mensurable y debidamente empaquetado para su consumo. 

Telescopios, autos, aviones, computadoras, celulares, satélites y otros desgraciadamente maravillosos adminículos tecnológicos se encargaron de ayudar al ser humano a eliminar de cuajo a todas esas bestias míticas que habían poblado la imaginación de la gente de los tiempos pasados.

¿O no fue así?

Aunque les parezca mentira, hay muchísimas personas que todavía creen que en algunas regiones ignotas de nuestro planeta perviven criaturas que son consideradas extrañas, olvidadas y extinguidas para la mayor parte del mundo. 

Como no podía ser de otra manera también hicieron su aparición “científicos” que, a la manera de sus antecesores de la edad media, se dedicaron a estudiar y describir a esos supuestos supervivientes de tiempos remotos. 

Esos individuos, que se escudan en una serie de explicaciones más o menos racionales, son conocidos con el nombre de Criptozoologos.

La Criptozoología es una disciplina (hasta el momento pseudocientífica) que se encarga de investigar la supuesta existencia de hipotéticos animales, a los que se los conoce con la denominación de Críptidos, los cuales se hallan por fuera de los catálogos zoológicos, extinguidos o totalmente desconocidos para la ciencia moderna. 
-EL MONSTRUO DE MONTAUK-

Este término fue acuñado en 1955 por el zoólogo franco-belga Bernard Heuvelmans (1916-2001), el cual incluso escribió un libro llamado Tras la Pista de Animales Desconocidos, que sería considerado como el génesis de toda esta estrafalaria ciencia.

El propio Heuvelmans negó ser merecedor de tal mérito, ya que a su vez cita que la primera referencia criptozoológica se remontaba al año 1892, cuando Anthoine C. Oudemans realizó un profundo estudio sobre la gran serpiente marina. 

La Criptozoología toma como base de análisis un riguroso estudio científico sobre las leyendas locales que hablan de la presencia de animales misteriosos en aquellas regiones poco exploradas de nuestro planeta. 
-OKAPI (Okapia Johnstoni)-

Lamentablemente toda esta pérdida de tiempo casi siempre conduce a callejones sin salida o hacia abismos de los cuales nunca vuelven a salir. Esto les valió numerosas críticas por parte de la comunidad científica, que considera como poco valederas las pruebas presentadas por los Criptozoologos, pues muchas veces estos modifican las leyendas a su antojo con el fin de hacerlas encajar con algún animal existente o extinto a fin de otorgarle algo de verosimilitud al asunto.
-CELACANTO (Latimeria Chalumnae)
Otra crítica es que, a pesar de haberse adjudicado ciertos descubrimientos, muchos de los animales supuestamente extintos o inexistentes que han sido encontrados a lo largo del planeta; entre ellos puede citarse al Celacanto (un pez que había desaparecido hacía 65 millones de años y que fue encontrado nuevamente en los años 50), el calamar gigante (que diera origen a la leyenda del Kraken) y el Okapi (un animal perteneciente a la familia de las jirafas, pero con el cuello corto, que fuera descubierto gracias a las leyendas contadas por las tribus pigmeas); ninguno de ellos fue hallado jamás por un criptozoólogo.
-EL DIABLO DE JERSEY-

El otro gran error en el que incurren estos estudiosos es que casi siempre piensan en términos de un solo animal que, a menos que se reproduzca como una ameba, le sería muy difícil afrontar el paso inexorable del tiempo, sin contar con el sencillo hecho de que la naturaleza necesita de una señora/señor monstruo que permita la supervivencia de la especie. Este pequeño detalle haría que la posibilidad de encontrarnos con algún miembro de esa misteriosa especie sea aun mayor... entonces surge la inevitables preguntas...

¿Por qué no son encontrados? 

¿Por qué son tan dudosos los avistamientos realizados?

¿Por qué los documentos gráficos existentes son una auténtica porquería a pesar del gran avance tecnológico que hemos tenido en estos últimos años? 

A pesar de todas estas críticas e interrogantes, los criptozoologos no bajan sus banderas y cada tanto nos sorprenden con nuevas teorías, hallazgos, fotografías y filmaciones (por lo general borrosas y de pésima factura) haciéndonos pensar si nuestro planeta todavía no esconde algunos secretos muy difíciles de ser comprobados.
-CALAMAR GIGANTE (Género Architeuthis)

2) Clasificación de lo imposible

Dentro del vasto e improbable bestiario de Críptidos podemos citar la siguiente clasificación:

a) Criaturas acuáticas (lacustres y marinas)

-El Monstruo del Lago Ness (Escocia): por supuesto nos estamos refiriendo al querido y entrañable Nessie.

-El Monstruo del Lago Champlain (EE.UU.): versión norteamericana del anterior, conocido por los indígenas del lugar como Chaourarou.

-Nahuelito (Argentina): como no queríamos ser menos, en mi país nos inventamos un monstruito que vive en el lago Nahuel Huapi.

-Ogopogo (Canadá): supuesta serpiente gigante que vive en el lago Okanagan.

-Kelpie (mitología celta): una suerte de caballo acuático con muy mala onda que vive en los lagos escoceses.

-Kraken: no es otro que el célebre calamar gigante, cuya existencia ha sido comprobada a partir de finales del siglo XIX. 

-Leviatán:  monstruo marino gigante que aparece en el Antiguo Testamento y que algunos criptozoologos han identificado como un mosasaurio.

-Tiburón gigante: se supone que se refieren al escualo extinto Megalodon, del cual se han encontrado gran cantidad de dientes.
-Sirenas:  la mayor parte de las fotos que hay sobre estas supuestas criaturas son falsificaciones. 

-Kaijin (Japon): monstruo marino japonés que posee cierta semejanza con un ser humano.

-La Serpiente Marina: la gran cantidad de avistamientos de estas criaturas le han asignado un lugar de importancia en los estudios criptozoologicos.

b) Criaturas terrestres
-EL YETI-

-La Bestia de Gévaudan (Francia): bestia de aspecto lobuno que, entre los años 1764 y 1767, atacó a unas 100 personas.

-La Bestia Negra de Exmoor (Inglaterra): felino carnívoro de gran tamaño que ataca a las ovejas.

-La Bestia de Loveland (EEUU):  se lo describe como una criatura humanoide con rostro de rana.

-El Chupacabras (Centro y Sudamérica): criatura de dudoso origen que ataca al ganado y cuya supuesta existencia se extiende a lo largo de buena parte de América del Sur y Central.

-Mokele-Mbenbe (África central):  una especie de dinosaurio anfibio que habita los pantanos africanos.

-Mapinguari (Sudamérica): según las descripciones se trataría de un Megaterio o un Milodon superviviente.

-Monomofeta (EE.UU.): una suerte de Yeti que se encuentra en los pantanos de la Florida
-HUMANZEE-

-Humanzee (Congo): mono humanoide que fue famoso en la década del 70 al ser presentado en un espectáculo circense.

-Oran Pendek (Sumatra): criatura hominida de características similares al orangutan.

-Pie Grande (EEUU): tan famoso como el Yeti, pero bien norteamericano

-Yeti (Himalaya): es la famosa criatura humanoide conocida como Abominable Hombre de las Nieves

-Wéndigo (EEUU y Canada):  criatura de similares características a los anteriores y que aparece en numerosas leyendas indígenas.

-Chuchuna (Rusia): un supuesto eslabón perdido de los aborígenes paleoasiáticos siberianos.

-Kasai Rex (República democrática del Congo): según las descripciones se trataría de un dinosaurio carnívoro, aunque muchos creen que en realidad es un lagarto monitor.

-El demonio de Dover (EEUU): criatura humanoide enana y de gran cabeza que se ha asociado más a los OVNIS que a un críptido.

-Los reptiles humanoides: raza pre-humana evolucionada a partir de ancestros reptilianos y que han formado parte de innumerable cantidad de mitologías.

-Jucumari (Argentina y Bolivia): homínido extinto presente en el folklore quechua.
-PIE GRANDE-

-Yowie (Australia):  criatura mítica australiana de similares características de Pie Grande.


-Adjule (Africa del Norte): una suerte de elusivo perro lobo del desierto del Sahara.

-Almas (Asia/región del Caucaso): humanoides salvajes de la mitología Mongol.

-Amomongo (Filipinas): mono salvaje negro que se caracteriza por sus largas uñas.

-La Bestia de Bladenboro (EEUU): criatura vampírica de características felinas que fue responsable de una serie de muertes en la década del 50.

-Black Shuck (Inglaterra): uno de los tantos perros negros fantasmales que han sido avistados en suelo inglés.

-Garou (EEUU): uno de los nombres dados al mítico Hombre Lobo.

-Ngoubou (Camerun):  una especie de dinosaurio con cuernos, probablemente un ceratópsido, que lucha contra los elefantes.

c) Criaturas aéreas

-El Hombre Polilla (EEUU): criatura humanoide gigante con alas, similar al insecto mencionado

-El Diablo de Jersey (EEUU): se trata de una criatura voladora con pezuñas proveniente de los mitos indígenas norteamericanos.
-KONGAMATO-

-Kongamato (Africa): monstruo volador de características reptilianas, cuyas características corresponden al famoso pterodáctilo.

-La Mujer Alada de Vietnam: criatura voladora con la apariencia de una mujer desnuda, observada por miembros del ejército de los EE.UU... que vivían permanentemente drogados

-Rods: algo así como unas varas voladoras que según algunos estudiosos corresponde a seres de otra dimensión.

-Ahool (Indonesia): otro bichito similar a un pterodáctilo que tiene la mala costumbre de no querer extinguirse como Dios manda.

-Aswang (Filipinas): una suerte de hombre lobo vampiro.

-El Tigre Alado de Chinael nombre lo dice todo... así que no me pidan un texto inteligente.

En este informe, que recién está comenzando a tomar vuelo, me voy a encargar de contarles (y por lo general defenestrar) a varios de estos improbables bichos que, a lo largo de muchas décadas han logrado capturar la imaginación del común de la gente que aun quiere creer que este planeta tiene muchas sorpresas para ofrecer.
-REPTIL HUMANOIDE-

A esta altura del artículo muchos de ustedes se estarán preguntando que hace este imbécil hablando del monstruo del lago Ness, el Yeti, el Chupacabras o de un Tigre alado, si no cree en sus existencias… y la verdad es que tienen toda la razón del mundo, pero no tanto.

En mi fuero interno me encantaría que pudiera ser encontrado algún monstruo desconocido por la ciencia, un valle perdido lleno de dinosaurios o, incluso, que un OVNI aterrice en medio de la plaza de mi barrio. 

Lamentablemente, estamos viviendo en un mundo al que solemos llamar real. Un mundo que resulta ser mucho más prosaico e insidiosamente peligroso de lo que nos podemos llegar a imaginar y, muchas veces, estos bichos son tan solo un mero entretenimiento que podemos llegar a ver en algún videojuego o alguna película fantástica plagada de efectos especiales.

Pero, al mismo tiempo, también es inevitable que todo ser humano (que al fin yo también lo soy) siga soñando en que el mundo, y por ende el universo todo, siga siendo un misterio a pesar de lo que diga toda la ciencia moderna de la cual nos ufanamos día a día. 

Así que, si todavía conservan ese sentido de lo maravilloso que supo acompañarnos durante nuestra niñez, los invito a colocarse un casco de corcho e ir a visitar ese fantástico universo de ensueños que se encuentra muy lejos de la cotidianeidad que abruma nuestras pobres existencias mortales.
-KRAKEN-
Y como dice siempre un amigo mío... ¡Nos vemos pequeñas bestias!