1) NO ESTA MUERTO LO QUE YACE ETERNAMENTE
Agosto de 1945…
Luego de la caída del Tercer Reich y la muerte de Adolf Hitler, los EE.UU. dirigieron por fin su total atención hacia el frente de guerra que se estaba desarrollando en el Océano Pacífico.
Aunque estaban totalmente rodeados por sus enemigos y poco a poco iban abandonando los lugares que habían ido ocupando a inicios del conflicto armado, los japonés no se hallaban dispuestos a entregar así como así el territorio que les era propio.
Los americanos pagarían con la sangre de miles de soldados su intento por invadir las islas niponas.
Debido a este dilema, el presidente Harry S. Truman dio el visto bueno para que, en la madrugada del 6 de agosto, un avión bombardero cuatrimotor B-29 que respondía al nombre de Enola Gay volara sobre territorio japonés llevando en sus entrañas un increíble instrumento de muerte (apodado Little Boy), el cual sería soltado sobre una ciudad que contaba con una población estimada de 140.000 habitantes.
Tres días más tarde, otro de esos artefactos (esta vez con el nombre de Fat Man) caería en otra ciudad que se hallaba situada a poco más de 300 kilómetros del primer impacto.
Las bombas lanzadas por el Enola Gay formaban parte de un nefasto plan conocido como Proyecto Manhattan y eran de naturaleza nuclear…
Las dos ciudades se llamaban Hiroshima y Nagasaki, las únicas en toda la historia del hombre que recibirían semejante castigo…
El resultado: 200.000 personas muertas, muchas de ellas acaecidas varios meses después del bombardeo debido a la aparición de diferentes tipos de cáncer producidos por la radiación…
… y fue así como el destino de la humanidad cambió de manera radical.
El ingreso a la Era Atómica, la costosa carrera armamentística y la consecuente guerra fría ruso-norteamericana, que durante muchos años se encargó de poner en vilo a todos los habitantes de nuestro planeta, tuvo la extraña virtud de disparar la imaginación de todos aquellos que no les quedaba otra cosa que observar impotentes el arribo de un siniestro futuro.
Los vientos de una posible, y quizá inevitable, Tercera Guerra Mundial se transformó en algo cotidiano para el público en general.
Los escritores de la vertiente literaria conocida como ciencia ficción se encargaron de plasmar con acierto cientos de historias apocalípticas que se hallaban emparentadas de alguna manera más o menos ingeniosa con ese espantoso evento… el de una la guerra que realmente acabara con todas las guerras de manera definitiva.
El cine, como medio cabal de expresión de los miedos y pesares inherentes al ser humano, no pudo sustraerse de toda esa paranoia nuclear y fue así como salieron al ruedo gran cantidad de films de ciencia ficción dedicados a ello.
Dentro de las muchos subgéneros cinematográficos nacidos de esa simiente, vería la luz uno que sería muy característico de la década del 50 y que podría definirse como el de Monsters Movies o los films sobre monstruos gigantes revividos y/o mutados por una explosión nuclear.
Tal como ha sido visto en las otras categorías de cine de dinosaurios analizadas con anterioridad (y si no sabés de lo que estoy hablando pincha acá) este tipo de films tiene ciertas bases argumentales que los caracterizan:-
Debido a un experimento nuclear llevado a cabo por un grupo de científicos y militares, una criatura prehistórica es despertada de su letargo de millones de años. La mutación producida a raíz de la exposición a las radiaciones es opcional y, por lo general, produce un gigantismo desmesurado en nuestro muerto resucitado.
-Casi siempre hay un único sobreviviente al primer encuentro. que por regla general es un afamado científico fachero y simpático. Cuando este da su testimonio de lo sucedido, es tildado de loco.
-Al poco tiempo de la aparición del monstruo, comienzan a producirse inexplicables catástrofes y desapariciones de personas.
-Cuando los desastres van en aumento y el número de personas que han visto al monstruo se hace mayor, el testigo fachero y simpático considerado loco es reivindicado. A partir de allí pasa a formar parte del grupo de investigación científico-militar que ha sido creado para resolver el problema.
-Dentro de ese grupo, el testigo fachero y simpático (destinado a convertirse en el héroe de la película) conocerá a una desenfadada y bella secretaria/ayudante/doctora (“Yo creía que era un hombre pero resulto ser una hermosa muchacha a la cual invitaré a bailar”), la cual quedará inmediatamente prendada del fachero y simpático científico. Mientras el monstruo avanza inexorable por un sendero de destrucción, ella únicamente se imaginará casada, con dos hijos, coche y pastel de manzanas.
-Luego de algunos intentos fallidos por tratar de detenerlo, el monstruo hará su aparición en una ciudad de importancia (llámese San Francisco, Nueva York, Tokio, Londres, Villa Ortusar o la que corresponda) causando terribles estragos sobre edificios o monumentos representativos de dicha urbe y comiéndose a sus aterrados habitantes… los cuales tienen la mala costumbre de correr por delante de la gigantesca bestia o permanecer aterrados dentro de sus autos.
-En un último y desesperado intento, el testigo fachero y simpático idea una manera para poder derrotar al monstruo.
-En medio de bramidos, destrucción y mucho fuego, la criatura es exterminada totalmente (aunque a veces puede darse el caso que la misma haya dejado un huevo escondido en alguna parte de la ciudad, lo cual generará futuros problemas y un nuevo film).
-Mientras se lee la palabra The End, el testigo fachero y simpático abrazará y/o besara a la chica desenfadada y bella, mientras dice algún comentario como: “El poder del átomo puede ayudarnos… pero también puede destruirnos”.
La primera de las criaturas en aparecer en una de estas producciones sería nada más ni nada menos que un dinosaurio. El mismo haría su espectacular aparición en una de las películas más clásicas e icónicas del cine de ciencia ficción y fantasía: La Bestia de Tiempos Remotos/El Monstruo del Mar (The Beast from 20000 Fathoms -1953-).
La acción da inicio en el Círculo Polar Ártico, cuando un grupo científico-militar está realizando unas pruebas para estudiar los efectos de una explosión atómica en el medio ambiente (como si eso les hubiera importado alguna vez). Debido a ello, grandes masas de hielo son derretidas y es así como despierta, luego de su letargo de 100 millones de años, un dinosaurio carnívoro ficticio llamado Rhedosaurus. El profesor Tom Nesbitt (Paul Christian) es el único testigo de la aparición del dino resucitado y nadie cree en su testimonio, tildándolo de loco.
El científico desacreditado será finalmente reivindicado, cuando el monstruo de marras comienza a causar destrucción a lo largo de la costa este del continente norteamericano, entre ellos unos barcos pesqueros y un faro.
Nesbitt se une al paleontólogo Thurgood Elson (Cecil Kellaway) y su bella ayudante Lee Hunter (Paula Raymond), los cuales descubren que el Rhedosaurus está emigrando a la zona en donde se halla asentada la ciudad de Nueva York.
Tal cual lo predicho, el gigantesco monstruo hace su aparición en la Gran Manzana devastando todo a su paso. Las fuerzas del ejército, al mando del Coronel Jack Evans (Kenneth Tobey), intentan detener al mismo con vallas electrificadas y bazookas pero, para colmo de males, de las heridas recibidas mana sangre que contiene un tipo de germen patógeno prehistórico que enferma de muerte a las personas que toman contacto con ella.
En un acto desesperado, científicos y militares deciden utilizar un proyectil que contiene un isótopo radiactivo. Herido de muerte, el Rhedosaurio sucumbirá en el parque de diversiones de Coney Island y terminará siendo devorado por el fuego purificador. ¡The End!
A mediados de la década del 50, los cines de los EE.UU. repusieron la monumental historia del mono King Kong que había sido estrenada allá por 1933. La misma tuvo un buen éxito de taquilla, ya que tanto los dinosaurios como los monstruos gigantes seguían ejerciendo una gran fascinación sobre los espectadores, en especial los chicos. Dos productores muy avispados llamados Jack Dietz y Hal E. Chester, al darse cuenta de toda esa movida, vieron en todo eso un interesante filón que podía llegar a ser explotado comercialmente.
Con esa finalidad en sus cabezas, dirigieron su atención a un cuento fantástico que había sido publicado en The Saturday Evening Post llamado The Fog Horn (originalmente tenía por título “The Beast from 20000 Fathoms”) el cual había sido escrito por Ray Bradbury (1920-2012), un famoso escritor de ciencia ficción entre cuyos créditos figuran Cronicas Marcianas y Fahrenheit 451.
Dicho relato contaba la historia de un reptil prehistórico marino que, al ser atraído por el llamado de la sirena de un faro, destruye el mismo en un acceso de ira al darse cuenta que no se trata de alguien de su especie. Si bien este cuento es una suerte de parábola sobre el amor no correspondido, lo que interesó a los productores fue la imagen que acompañaba al mismo en donde se veía un dinosaurio destruyendo un faro. A título informativo, este cuento fue editado en la Argentina por Editorial Minotauro en el libro Las Doradas Manzanas del Sol.
Luego de llegar a un acuerdo económico con Bradbury e invitarlo para que participara en el proyecto, la historia original fue readaptada y ampliada a un guión cinematográfico gracias a las labores de Lou Morheim y Fred Freibergerg.
La persona encargada de dirigirla fue Eugène Lourié (1903-1991), un director artístico nacido en Rusia y radicado en Francia que había trabajado junto a grandes directores como Jean Renoir, René Clair, Sam Fuller, Charles Chaplin y Robert Siodmak.
Su debut cinematográfico fue precisamente con The Beast from 20000 Fathoms y, debido a ello, los films que realizaría en los años subsiguientes estarían encasillados dentro de este género tan particular -The Colossus of New York (1958), The Giant Behemot (1959) y Gorgo (1961)-. Lourié recibiría un Oscar gracias a los efectos especiales realizados para la película Krakatoa, al Este de Java (Krakatoa, East of Java -1969-).
La música había sido compuesta originalmente por Michel Michelet, pero cuando los estudios Warner Bros. compraron la producción le pidieron a David Buttolph que escribiera una nueva partitura, la cual se transformaría en la pauta musical que caracterizaría a este tipo del films de corte fantástico.
Una mención aparte la merece el apartado de los efectos especiales, los cuales estuvieron a cargo de del maestro del Stop-motion (animación cuadro por cuadro) Ray Harryhausen (1920-2013), siendo este su primer trabajo en solitario tras haber colaborado con Willis O´Brien en El Gran Gorila (Mighty Joe Young -1949-).
Fue en esta producción que comenzó a utilizar su personal técnica en la cual se filmaban dos escenas diferentes (una en la que aparecen los actores y otra en donde aparecía el Rhedosaurio y el resto de los efectos especiales) las cuales eran posteriormente ensambladas de manera magistral por este inigualable creador.
En loa primeros diseños realizados por Harryhausen, el monstruo iba a tener una suerte de gorguera osea en la cabeza, a la manera de un dinosaurio ceratopsiano como el triceratops y un pico, pero finalmente adoptaría una morfología similar a la de un dinosaurio cuadrúpedo con una cabeza similar a un Tyrannosaurus. También se había planeado que el mismo lanzaría fuego radiactivo por la boca pero, por problemas presupuestarios, dicho efecto fue finalmente descartado.
En lo que se refiere a la parte actoral, los protagonistas principales fueron una amalgama de nombres conocidos e ilustres desconocidos, a saber:-
-Paul Christian (Profesor Tom Nesbitt): actor suizo cuyo nombre real era el de Paul Hubschmid. Trabajó en la producción My Fair Lady, algunos films europeos y series de televisión.
-Paula Raymond (Lee Hunter): modelo y actriz que trabajó en películas englobadas dentro del género conocido como cine negro y en numerosas series televisivas como Maverick, Hawai 5 0, Perry Mason y 77 Sunset Strip.
-Cecil Kellaway (Doctor Thurgood Elson): un conocido actor que participó en numerosas producciones cinematográficas como The Invisible Man Return (1940), The Mummy´s Hand (1940), The Postman Always Rings Twice (1946), Harvey (1950) y Kim (1950).
-Kenneth Tobey (Coronel Jack Evans): este personaje es una figurita archiconocida en muchas películas de ciencia ficción y terror como The Thing from Another World (1951), It Came From Beneath the Sea (1955), The Howling (1981), Strange Invaders (1983), Gremlins (1984), Gremlins 2: The New Batch (1990) y Hellraiser Bloodline (1996). También pudo vérselo participar en films de la talla de Gunfight at the OK Corral (1957), Ben (1972), The Missiles of October (1974), MacArthur (1977), Airplane! (1980) y Big Top Pee-Wee (1988).
Dentro de los actores secundarios es de destacar la pequeña aparición de un joven Lee Van Cleff (El Bueno, El Malo y el Feo y Sabata), interpretando a un cabo encargado de dar el disparo de muerte al querido Rhedosaurus.
Con un costo de producción de tan solo U$S 210.000, El Monstruo de Tiempos Remotos recaudó más de dos millones de dólares en su primer año de lanzamiento y terminaría transformándose en todo un éxito de taquilla tanto en su país como en el resto del mundo. También tuvo el honor de formar parte del AFI´s Top 10 Science Fiction Films List.
Sin duda alguna de mi parte, El Monstruo de Tiempos Remotos es una muestra cabal de su época y del cine clase B pero, a pesar de ello, tiene la extraña e hipnótica virtud de entretener sin vergüenza alguna hasta el crítico más exacerbado. Aunque bastante alejado de sus trabajos posteriores, el Rhedosaurio de Ray Harryhausen respira vitalidad en cada una de las escenas en las cuales hace su aparición... lo cual de por si es más que destacable.
La idea de un monstruo revivido y/o mutado por la radiación, al que le anexaron otros eventos catastróficos como los terremotos y otros desastres naturales que se encargaban de despertarlos de su sueño de eones, prendió hondamente en el gusto del público. Es por ello que este film se transformó en la piedra basal para la realización de cientos de películas de “mostros” gigantes pisamaquetas, como arañas (Tarantula -1955-), hormigas (Them!), pulpos (It Came from Beneath the Sea -1955-), lagartos (The Giant Gila Monster -1959-), Mantis (The Deadly Mantis -1957-), escorpiones (The Black Scorpion -1957-), gusanos prehistóricos (The Monster that Challenged the World -1957-) e incluso seres humanos (The Amazing Colossal Man -1957-)
El Monstruo de Tiempos Remotos también se transformaría en una gran fuente de inspiración para la creación de un subgénero cinematográfico con identidad propia que sería conocido con el extraño nombre de Kaiju Eiga o, para ser más claros, películas de monstruos a la japonesa.
¡¡Esta honolable histolia continualá!!
FICHA TECNICA
Producción: Bernad W. Burton, Hal E. Chester y Jack Dietz (Jack Dietz Productions)
Distribución: Warner Bros.
Dirección: Eugène Lourié
Guión: Lou Morheim, Fred Freiberger, Daniel James, Eugène Lourié y Robert Smith basado en un cuento de Ray Bradbury
Música: David Buttolph
Diseño de producción: Eugène Lourié
Decorados: Edward G. Boyle
Fotografía: Jack Rusell
Efectos especiales: Willis Cook, Ray Harryhausen, George Lofgren y Eugène Lourié
Protagonistas: Paul Christian (Profesor Tom Nesbitt), Paula Raymond (Lee Hunter), Cecil Kellaway (Profesor Thurgood Elson), Kenneth Tobey (Coronel Jack Evans), Donald Woods (Capitán Phil Jackson), Lee Van Cleef (Cabo Stone), Steve Brodie, Ross Elliot, Jack Pennick, Ray Hyke y Paula Hill
Duración: 80 min.
Agosto de 1945…
Luego de la caída del Tercer Reich y la muerte de Adolf Hitler, los EE.UU. dirigieron por fin su total atención hacia el frente de guerra que se estaba desarrollando en el Océano Pacífico.
Aunque estaban totalmente rodeados por sus enemigos y poco a poco iban abandonando los lugares que habían ido ocupando a inicios del conflicto armado, los japonés no se hallaban dispuestos a entregar así como así el territorio que les era propio.
Los americanos pagarían con la sangre de miles de soldados su intento por invadir las islas niponas.
Debido a este dilema, el presidente Harry S. Truman dio el visto bueno para que, en la madrugada del 6 de agosto, un avión bombardero cuatrimotor B-29 que respondía al nombre de Enola Gay volara sobre territorio japonés llevando en sus entrañas un increíble instrumento de muerte (apodado Little Boy), el cual sería soltado sobre una ciudad que contaba con una población estimada de 140.000 habitantes.
Tres días más tarde, otro de esos artefactos (esta vez con el nombre de Fat Man) caería en otra ciudad que se hallaba situada a poco más de 300 kilómetros del primer impacto.
Las bombas lanzadas por el Enola Gay formaban parte de un nefasto plan conocido como Proyecto Manhattan y eran de naturaleza nuclear…
Las dos ciudades se llamaban Hiroshima y Nagasaki, las únicas en toda la historia del hombre que recibirían semejante castigo…
El resultado: 200.000 personas muertas, muchas de ellas acaecidas varios meses después del bombardeo debido a la aparición de diferentes tipos de cáncer producidos por la radiación…
… y fue así como el destino de la humanidad cambió de manera radical.
El ingreso a la Era Atómica, la costosa carrera armamentística y la consecuente guerra fría ruso-norteamericana, que durante muchos años se encargó de poner en vilo a todos los habitantes de nuestro planeta, tuvo la extraña virtud de disparar la imaginación de todos aquellos que no les quedaba otra cosa que observar impotentes el arribo de un siniestro futuro.
Los vientos de una posible, y quizá inevitable, Tercera Guerra Mundial se transformó en algo cotidiano para el público en general.
Los escritores de la vertiente literaria conocida como ciencia ficción se encargaron de plasmar con acierto cientos de historias apocalípticas que se hallaban emparentadas de alguna manera más o menos ingeniosa con ese espantoso evento… el de una la guerra que realmente acabara con todas las guerras de manera definitiva.
El cine, como medio cabal de expresión de los miedos y pesares inherentes al ser humano, no pudo sustraerse de toda esa paranoia nuclear y fue así como salieron al ruedo gran cantidad de films de ciencia ficción dedicados a ello.
Dentro de las muchos subgéneros cinematográficos nacidos de esa simiente, vería la luz uno que sería muy característico de la década del 50 y que podría definirse como el de Monsters Movies o los films sobre monstruos gigantes revividos y/o mutados por una explosión nuclear.
Tal como ha sido visto en las otras categorías de cine de dinosaurios analizadas con anterioridad (y si no sabés de lo que estoy hablando pincha acá) este tipo de films tiene ciertas bases argumentales que los caracterizan:-
Debido a un experimento nuclear llevado a cabo por un grupo de científicos y militares, una criatura prehistórica es despertada de su letargo de millones de años. La mutación producida a raíz de la exposición a las radiaciones es opcional y, por lo general, produce un gigantismo desmesurado en nuestro muerto resucitado.
-Casi siempre hay un único sobreviviente al primer encuentro. que por regla general es un afamado científico fachero y simpático. Cuando este da su testimonio de lo sucedido, es tildado de loco.
-Al poco tiempo de la aparición del monstruo, comienzan a producirse inexplicables catástrofes y desapariciones de personas.
-Cuando los desastres van en aumento y el número de personas que han visto al monstruo se hace mayor, el testigo fachero y simpático considerado loco es reivindicado. A partir de allí pasa a formar parte del grupo de investigación científico-militar que ha sido creado para resolver el problema.
-Dentro de ese grupo, el testigo fachero y simpático (destinado a convertirse en el héroe de la película) conocerá a una desenfadada y bella secretaria/ayudante/doctora (“Yo creía que era un hombre pero resulto ser una hermosa muchacha a la cual invitaré a bailar”), la cual quedará inmediatamente prendada del fachero y simpático científico. Mientras el monstruo avanza inexorable por un sendero de destrucción, ella únicamente se imaginará casada, con dos hijos, coche y pastel de manzanas.
-Luego de algunos intentos fallidos por tratar de detenerlo, el monstruo hará su aparición en una ciudad de importancia (llámese San Francisco, Nueva York, Tokio, Londres, Villa Ortusar o la que corresponda) causando terribles estragos sobre edificios o monumentos representativos de dicha urbe y comiéndose a sus aterrados habitantes… los cuales tienen la mala costumbre de correr por delante de la gigantesca bestia o permanecer aterrados dentro de sus autos.
-En un último y desesperado intento, el testigo fachero y simpático idea una manera para poder derrotar al monstruo.
-En medio de bramidos, destrucción y mucho fuego, la criatura es exterminada totalmente (aunque a veces puede darse el caso que la misma haya dejado un huevo escondido en alguna parte de la ciudad, lo cual generará futuros problemas y un nuevo film).
-Mientras se lee la palabra The End, el testigo fachero y simpático abrazará y/o besara a la chica desenfadada y bella, mientras dice algún comentario como: “El poder del átomo puede ayudarnos… pero también puede destruirnos”.
La primera de las criaturas en aparecer en una de estas producciones sería nada más ni nada menos que un dinosaurio. El mismo haría su espectacular aparición en una de las películas más clásicas e icónicas del cine de ciencia ficción y fantasía: La Bestia de Tiempos Remotos/El Monstruo del Mar (The Beast from 20000 Fathoms -1953-).
La acción da inicio en el Círculo Polar Ártico, cuando un grupo científico-militar está realizando unas pruebas para estudiar los efectos de una explosión atómica en el medio ambiente (como si eso les hubiera importado alguna vez). Debido a ello, grandes masas de hielo son derretidas y es así como despierta, luego de su letargo de 100 millones de años, un dinosaurio carnívoro ficticio llamado Rhedosaurus. El profesor Tom Nesbitt (Paul Christian) es el único testigo de la aparición del dino resucitado y nadie cree en su testimonio, tildándolo de loco.
El científico desacreditado será finalmente reivindicado, cuando el monstruo de marras comienza a causar destrucción a lo largo de la costa este del continente norteamericano, entre ellos unos barcos pesqueros y un faro.
Nesbitt se une al paleontólogo Thurgood Elson (Cecil Kellaway) y su bella ayudante Lee Hunter (Paula Raymond), los cuales descubren que el Rhedosaurus está emigrando a la zona en donde se halla asentada la ciudad de Nueva York.
Tal cual lo predicho, el gigantesco monstruo hace su aparición en la Gran Manzana devastando todo a su paso. Las fuerzas del ejército, al mando del Coronel Jack Evans (Kenneth Tobey), intentan detener al mismo con vallas electrificadas y bazookas pero, para colmo de males, de las heridas recibidas mana sangre que contiene un tipo de germen patógeno prehistórico que enferma de muerte a las personas que toman contacto con ella.
En un acto desesperado, científicos y militares deciden utilizar un proyectil que contiene un isótopo radiactivo. Herido de muerte, el Rhedosaurio sucumbirá en el parque de diversiones de Coney Island y terminará siendo devorado por el fuego purificador. ¡The End!
Con esa finalidad en sus cabezas, dirigieron su atención a un cuento fantástico que había sido publicado en The Saturday Evening Post llamado The Fog Horn (originalmente tenía por título “The Beast from 20000 Fathoms”) el cual había sido escrito por Ray Bradbury (1920-2012), un famoso escritor de ciencia ficción entre cuyos créditos figuran Cronicas Marcianas y Fahrenheit 451.
Dicho relato contaba la historia de un reptil prehistórico marino que, al ser atraído por el llamado de la sirena de un faro, destruye el mismo en un acceso de ira al darse cuenta que no se trata de alguien de su especie. Si bien este cuento es una suerte de parábola sobre el amor no correspondido, lo que interesó a los productores fue la imagen que acompañaba al mismo en donde se veía un dinosaurio destruyendo un faro. A título informativo, este cuento fue editado en la Argentina por Editorial Minotauro en el libro Las Doradas Manzanas del Sol.
Luego de llegar a un acuerdo económico con Bradbury e invitarlo para que participara en el proyecto, la historia original fue readaptada y ampliada a un guión cinematográfico gracias a las labores de Lou Morheim y Fred Freibergerg.
La persona encargada de dirigirla fue Eugène Lourié (1903-1991), un director artístico nacido en Rusia y radicado en Francia que había trabajado junto a grandes directores como Jean Renoir, René Clair, Sam Fuller, Charles Chaplin y Robert Siodmak.
Su debut cinematográfico fue precisamente con The Beast from 20000 Fathoms y, debido a ello, los films que realizaría en los años subsiguientes estarían encasillados dentro de este género tan particular -The Colossus of New York (1958), The Giant Behemot (1959) y Gorgo (1961)-. Lourié recibiría un Oscar gracias a los efectos especiales realizados para la película Krakatoa, al Este de Java (Krakatoa, East of Java -1969-).
La música había sido compuesta originalmente por Michel Michelet, pero cuando los estudios Warner Bros. compraron la producción le pidieron a David Buttolph que escribiera una nueva partitura, la cual se transformaría en la pauta musical que caracterizaría a este tipo del films de corte fantástico.
Una mención aparte la merece el apartado de los efectos especiales, los cuales estuvieron a cargo de del maestro del Stop-motion (animación cuadro por cuadro) Ray Harryhausen (1920-2013), siendo este su primer trabajo en solitario tras haber colaborado con Willis O´Brien en El Gran Gorila (Mighty Joe Young -1949-).
Fue en esta producción que comenzó a utilizar su personal técnica en la cual se filmaban dos escenas diferentes (una en la que aparecen los actores y otra en donde aparecía el Rhedosaurio y el resto de los efectos especiales) las cuales eran posteriormente ensambladas de manera magistral por este inigualable creador.
En loa primeros diseños realizados por Harryhausen, el monstruo iba a tener una suerte de gorguera osea en la cabeza, a la manera de un dinosaurio ceratopsiano como el triceratops y un pico, pero finalmente adoptaría una morfología similar a la de un dinosaurio cuadrúpedo con una cabeza similar a un Tyrannosaurus. También se había planeado que el mismo lanzaría fuego radiactivo por la boca pero, por problemas presupuestarios, dicho efecto fue finalmente descartado.
En lo que se refiere a la parte actoral, los protagonistas principales fueron una amalgama de nombres conocidos e ilustres desconocidos, a saber:-
-De izq. a der.: Paul Christian, Paula Raymond y Cecil Kellaway- |
-Paul Christian (Profesor Tom Nesbitt): actor suizo cuyo nombre real era el de Paul Hubschmid. Trabajó en la producción My Fair Lady, algunos films europeos y series de televisión.
-Paula Raymond (Lee Hunter): modelo y actriz que trabajó en películas englobadas dentro del género conocido como cine negro y en numerosas series televisivas como Maverick, Hawai 5 0, Perry Mason y 77 Sunset Strip.
-Cecil Kellaway (Doctor Thurgood Elson): un conocido actor que participó en numerosas producciones cinematográficas como The Invisible Man Return (1940), The Mummy´s Hand (1940), The Postman Always Rings Twice (1946), Harvey (1950) y Kim (1950).
-Kenneth Tobey (Izq.) y Paul Christian (Der.) |
-Kenneth Tobey (Coronel Jack Evans): este personaje es una figurita archiconocida en muchas películas de ciencia ficción y terror como The Thing from Another World (1951), It Came From Beneath the Sea (1955), The Howling (1981), Strange Invaders (1983), Gremlins (1984), Gremlins 2: The New Batch (1990) y Hellraiser Bloodline (1996). También pudo vérselo participar en films de la talla de Gunfight at the OK Corral (1957), Ben (1972), The Missiles of October (1974), MacArthur (1977), Airplane! (1980) y Big Top Pee-Wee (1988).
Dentro de los actores secundarios es de destacar la pequeña aparición de un joven Lee Van Cleff (El Bueno, El Malo y el Feo y Sabata), interpretando a un cabo encargado de dar el disparo de muerte al querido Rhedosaurus.
-Set de filmación- |
Sin duda alguna de mi parte, El Monstruo de Tiempos Remotos es una muestra cabal de su época y del cine clase B pero, a pesar de ello, tiene la extraña e hipnótica virtud de entretener sin vergüenza alguna hasta el crítico más exacerbado. Aunque bastante alejado de sus trabajos posteriores, el Rhedosaurio de Ray Harryhausen respira vitalidad en cada una de las escenas en las cuales hace su aparición... lo cual de por si es más que destacable.
La idea de un monstruo revivido y/o mutado por la radiación, al que le anexaron otros eventos catastróficos como los terremotos y otros desastres naturales que se encargaban de despertarlos de su sueño de eones, prendió hondamente en el gusto del público. Es por ello que este film se transformó en la piedra basal para la realización de cientos de películas de “mostros” gigantes pisamaquetas, como arañas (Tarantula -1955-), hormigas (Them!), pulpos (It Came from Beneath the Sea -1955-), lagartos (The Giant Gila Monster -1959-), Mantis (The Deadly Mantis -1957-), escorpiones (The Black Scorpion -1957-), gusanos prehistóricos (The Monster that Challenged the World -1957-) e incluso seres humanos (The Amazing Colossal Man -1957-)
El Monstruo de Tiempos Remotos también se transformaría en una gran fuente de inspiración para la creación de un subgénero cinematográfico con identidad propia que sería conocido con el extraño nombre de Kaiju Eiga o, para ser más claros, películas de monstruos a la japonesa.
¡¡Esta honolable histolia continualá!!
FICHA TECNICA
Producción: Bernad W. Burton, Hal E. Chester y Jack Dietz (Jack Dietz Productions)
Distribución: Warner Bros.
Dirección: Eugène Lourié
Guión: Lou Morheim, Fred Freiberger, Daniel James, Eugène Lourié y Robert Smith basado en un cuento de Ray Bradbury
Música: David Buttolph
Diseño de producción: Eugène Lourié
Decorados: Edward G. Boyle
Fotografía: Jack Rusell
Efectos especiales: Willis Cook, Ray Harryhausen, George Lofgren y Eugène Lourié
Protagonistas: Paul Christian (Profesor Tom Nesbitt), Paula Raymond (Lee Hunter), Cecil Kellaway (Profesor Thurgood Elson), Kenneth Tobey (Coronel Jack Evans), Donald Woods (Capitán Phil Jackson), Lee Van Cleef (Cabo Stone), Steve Brodie, Ross Elliot, Jack Pennick, Ray Hyke y Paula Hill
Duración: 80 min.
GALERIA DE IMAGENES
Cansado de ver por Internet las mismas 20 o 30 imágenes sobre esta película, me dije: "Si vos tenés la película en DVD... ¿Que estás esperando para realizar las capturas de pantalla que te gustaría tener?"
Pues acá las tienen. Tan solo espero que lo disfruten.
Me acuerdo cuando era niño y vi esta pelicula, me asusto bastante jejejeje :)
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