Buscar este blog

Powered By Blogger

viernes, 21 de octubre de 2016

HISTORIAS DE MUCHO MIEDITO (5)

¡¡ MAMAKHEKA GHASO!!

“Noche de sábado…

Afectado de grata manera por el alcohol que consumiste en la fiesta a la cual te invitaron, arribás a tu morada. Mientras tratás de colocar la llave en la cerradura, un ligero viento frío te hace estremecer. Con los sentidos enturbiados, dirigís tu atención a lo que te rodea, en un intento por buscar el motivo de la misteriosa desazón que te ha invadido de manera tan súbita.


Estas solo con la noche. Muy solo.


Algo nervioso, finalmente lográs abrir la puerta y te dirigís, tambaleante, hacia el baño con el fin de tratar de despejar tu nublado entendimiento. A pesar del  desastroso estado en que te encontrás y la oscuridad reinante, lográs sortear hábilmente el laberinto de muebles, pues no te sentís dispuesto a encender ninguna fuente de iluminación que pueda herir tus ya sobreexcitados sentidos.


Cuando abrís la puerta del baño, un sonido, como un suspiro ahogado, detiene bruscamente tu avance. Un nuevo estremecimiento gana todo tu ser cuando por fin tus ojos se adaptan a la oscuridad que te rodea y pueden ver el origen del mismo.


En un rincón, cerca de la bañera, una presencia sombría se halla sollozando de manera queda. 


Emitiendo un ahogado gemido nacido del 
terror más puro , intentás encontrar la llave de luz. Al notar tu presencia, la figura misteriosa se sume en un aterrador silencio y levanta su rostro hacia tu persona.

En la espesa lobreguez reinante, un pálido rostro y unos ojos terribles te observan fijamente. Un pavor, que resulta totalmente incontenible, comienza a ganar todo tu ser. 


Con el corazón palpitando aceleradamente, lográs encender por fin la luz. Cuando la oscuridad cede ante la viva luminosidad, tomás cabal conciencia que el baño se encuentra totalmente vacío. Frente tuyo no hay nada… ni nadie.

Pero detrás de ti puedes sentir el espantoso aliento de una implacable criatura fantasmal.”


Cuando hablamos de fantasmas, tenemos que hablar sobre la historia misma de la humanidad. 

Desde que el primer hombre miró más allá de su precario refugio, los relatos sobre espíritus, espectros, almas en pena y otras presencias provenientes de más allá de nuestro plano de existencia han sabido transformarse en moneda corriente, aun en nuestro tecnológico y racional siglo XXI.

Si bien existen diferentes ideologías entre las religiones que medran sobre la superficie de nuestro planeta, en todas ellas se habla de la trascendencia del ser humano hacia un plano superior de existencia, al cual arribarán sus espíritus luego de haberse producido la muerte del cuerpo físico. Los rituales funerarios presentes en todos ellos son, por regla general, una manera de evitar que esos espíritus no vuelvan a atormentar con sus presencias al mundo de los vivos.

Parafraseando un viejo dicho: “Los fantasmas no existen, pero que los hay los hay”.

Cuando me propuse escribir sobre fantasmas me di cuenta que el asunto no iba a ser nada fácil. A ponerme a investigar, muy pronto descubrí que me estaba enfrentando a un muy serio dilema…

¿Alcanzará una única entrada para hablar sobre un tema tan vasto? No tenía que ser ningún genio para saber que era poco menos que imposible.

¿Qué hice entonces? El típico curro que solemos usar los escritores para alargar un tema hasta casi el hartazgo: escribir varios artículos sobre la misma temática…


¡Soy un auténtico genio! 

(suenen pitos y matracas)

No cabe duda que, sean estos buenos o malos, los fantasmas nos dan mucho miedo. Su sola presencia llena de intenso pavor a todos aquellos que en algún momento han tenido la oportunidad de ser testigos de tales eventos sobrenaturales del cual, si me apuran, puedo dar pruebas fehacientes de ello… historias de las cuales hablaré en algún futuro más o menos cercano (o sea, cuando me dé la gana).

Para mi gusto personal, los fantasmas que considero más aterradores y extraños son sin duda alguna los gestados en oriente. Pálidos, de movimientos espasmódicos y terriblemente vengativos, estas entidades llegaron a ser vastamente conocidos por los occidentales gracias al género cinematográfico conocido como Kaidan Eiga o J-Horror (Japan Horror).

Lejos de ser un invento moderno, las historias de fantasmas nipones tienen una existencia antiquísima que se remonta al medioevo japonés, ya que las mismas tienen gran importancia dentro de la tradición cultural de esas lejanas tierras. Nadie en el Japón se cuestiona si creen o no en ellos, a los que llaman Obake o Bakemono, ya que forman parte de su existencia cotidiana. Ello se debe a que, para los japoneses, la esencia espiritual habita en todas las cosas, incluso en los objetos inanimados. 

El fantasma japonés clásico vio la luz hacia finales del siglo XVII (Periodo Edo) merced a un popular juego llamado Hyakumonogatari Kaidankai. En el mismo se encendían 100 velas, las cuales eran apagadas a medida que era contada una historia de fantasmas (Kaidan). Con cada vela apagada, se invocaba la presencia de una persona del otro mundo y el  juego finalizaba cuando los participantes quedaban totalmente envueltos en la oscuridad.

Una de las historias más famosas fue la del fantasma de Okiku. De origen incierto, pero ampliamente conocido hacia 1655, esta leyenda cuenta la historia de una mujer llamada Okiku que rechaza el amor profesado por el shogun Aoyama Harima. En un rapto de locura, el vengativo Harima mata a Okiku y la arroja a un pozo. Tiempo después el fantasma de la occisa retorna para atormentarlo cada noche hasta que el culpable se somete al tradicional Seppuku (suicidio Made in Japón).

Otra historia muy conocida era la de Oiwa y Iemon, la cual tuvo una gran influencia dentro del género de horror oriental. La misma cuenta la historia de un hombre pobre que, al no poder mantener a su esposa que se halla en delicado estado, decide asesinarla de cruel manera. Mientras planea un matrimonio que le resulte más conveniente, el desfigurado fantasma de Oiwa comienza a atormentarlo hasta llevarlo a la muerte.

Estas y otras historias se convirtieron en un siniestro divertimento que tuvo la virtud de hacer que esos cuentos de fantasmas fueran haciéndose cada vez más populares, lo que les permitió trascender hacia otras facetas culturales como lo fueron la pintura, la literatura y el teatro Kabuki (1).

A diferencia del típico fantasma occidental –una sábana de dos plazas que carga pesadas cadenas- la mitología nipona reconoce varios tipos de espíritus sobrenaturales:-

-Yokai: son criaturas monstruosas que poseen ciertos poderes especiales. Tienen variadas formas (animales, demoníacas o humanas) que pueden incluso hallarse mezcladas entre sí. Este grupo puede incluir a todos los demonios y fantasmas que se encuentran descritos más abajo.

-Oni: esta denominación describe a los ogros y demonios. Por lo general son criaturas humanoides de gran tamaño, garras, pelo revuelto y cuernos.

-Tengu: demonio de características animales que habitan en los bosques de las zonas montañosas. Dentro de este grupo hay 4 variedades: el O Tengu (Gran Tengu), Karasu Tengu, Koppa Tengu y Kurama Tengu.

-Henge: son espíritus de animales los cuales poseen poderes sobrenaturales. Entre ellos se encuentran el Kitsume (zorro) y el Tanuki (mapache).

-Gaki o fantasmas hambrientos: son criaturas de aspecto demacrado, vientre hinchado y boca ancha, que sufren constantemente sed y hambre.

-Shura: espíritus que son las reencarnaciones de los guerreros muertos en combate.

-Kappa: espíritu maligno que vive en los cursos de agua. Tiene aspecto de tortuga y tiene un hueco en la cabeza con agua que le otorga gran poder. 

-Rokurokubi: Monstruosa criatura femenina que se caracteriza por su cuello serpentiforme. De día es una mujer de gran belleza, pero de noche se transforma en un demonio que absorbe la energía vital de los hombres.

-Yamamamba: demonio en forma de una anciana de cabello blanco desgreñado. Habita las montañas y, adoptando un aspecto aterrador, devora a los incautos.

-Nopperabo: unos espeluznantes fantasmas sin rostro que suele recorren las calles oscuras durante la noche.

- Yūrei: es el clásico fantasma japonés, el cual aparece cuando el alma (Reikon) no recibe el apropiado rito funerario, la muerte no fue natural o ha sido influenciado por el odio o la venganza. Es así como el alma en pena vaga por nuestro plano de existencia, atado a un sitio o persona determinada, y tan solo un rito apropiado podrá lograr que ese espíritu pueda finalmente reunirse con sus ancestros.

Los Yūrei casi siempre son mujeres, por lo general víctimas del maltrato y el asesinato injustificado. Tienen los cabellos largos, negros y muchas veces alborotados, pues se cree que el cabello continúa teniendo vida aun después de la muerte de su poseedor. Ese cabello nos habla de una emoción contenida, como la cólera o el rencor hacia quienes lo rodean… o sea los vivos.

Estos condenados seres visten con el Katabira, el clásico kimono blanco (2) utilizado en los rituales funerarios realizados en oriente. Su piel es sumamente pálida y ello se debe a la representación dada por el teatro Kabuki a los fantasmas, en donde los actores se pintan el rostro de blanco e índigo (Aiguma) para representar ese papel.

Dentro de este apartado fantasmal existen diferentes tipos de entidades. Entre ellos, podemos nombrar: 

-Ubume: el fantasma de una madre que ha muerto durante el parto o ha dejado huérfanos a sus hijos pequeños.

-Goryō: fantasma de origen aristocrático que, debido a un martirio que sufrieran en vida, vuelven del más allá para vengarse.

-Funayūrei: fantasma de los muertos en el mar.

-Zashiki-warashi: fantasmas de niños. 

-Onryō: es un espíritu que permanece en nuestro mundo por venganza, la cual no siempre va dirigida a quien haya provocado ese oscuro sentimiento. Son los fantasmas más difíciles de tratar, ya que no suelen ser contenidos por los ritos de purificación.

A principios del siglo XIX la literatura nipona hizo una reinterpretación de los viejos mitos presentes en las tradiciones chinas, japonesas y el confucianismo (3), gracias a la labor de autores como Ryunosuke Akutagawa, Lafcadio Hearn, Edogawa Rampo y su mayor mentor: Ueda Akinari. La labor realizada por todos ellos logró que los fantasmas se pudieran adaptar a los nuevos tiempos que estaban llegando.

El cine, ese gran devorador de ideas, no tardó en absorber para si todas esas creencias con el fin de entretener a las masas deseosas de ser asustadas.

Basado en la obra Kabuki sobre el Yūrei Oiwa conocida como Tōkaidō Yotsuya Kaidan, en 1912 se produjo la primera versión fílmica sobre esta narración, la cual había sido escrita en el año 1825. Esta fue una de las historias de fantasmas que más adaptaciones tuvo dentro de la cinematografía japonesa aunque, lamentablemente, muchas de esas copias terminaron siendo destruidas durante la Segunda Guerra Mundial.

En 1953 fue estrenada Ugetsu, la cual contó con la dirección de Kenji Mizoguchi. Este film, un auténtico clásico sobre fantasmas del Japón medieval, es una adaptación de las narraciones escritas por Ueda Akinari (4)
-UGETSU (1953)-
Otra de las películas conocidas sobre esta temática fue Kwaidan (El Más Allá-1964), la cual abrevó en las narraciones escritas por Lafcadio Hearn (5). La misma consta de cuatro narraciones de carácter fantástico sin ninguna relación entre sí.

A pesar de todas estas producciones dedicadas al tema de los fantasmas, sería necesario que pasaran varias décadas para que el cine de terror japonés trascendiera las fronteras y lograra su merecida popularidad a lo largo de todo el mundo.

Las Kaidan Eiga o películas de fantasmas surgieron en tierras japonesas hacia fines de la década de los 90, gracias a la labor del cineasta Hideo Nakata. El mismo asombró a todos los amantes del terror con su film Ringu (1998). 

La historia de la misma, que está basada en la novela de Kojo Suzuki, cuenta las peripecias de una periodista que, al haber muerto su prima en misteriosas y horrendas circunstancias, se verá envuelta en la macabra trama de una oscura leyenda urbana: un video que, al ser visto, lleva a la muerte en el término de una semana.

Carente de los fastuosos efectos especiales de las películas de terror yankis, Ringu se centra más en los aspectos psicológicos implicados ante la presencia de un evento sobrenatural en la vida cotidiana del ser humano, sin llegar a meditar sobre los dilemas morales o éticos que se desprenden del mismo.

En este tipo de films suele apelarse más a las insinuaciones que a las cosas que resultan ser obvias. A todo ello debe sumarse el soberbio manejo de las cámaras y la iluminación, que se encargan de transformar un sencillo argumento en una historia aterradora.


Como era de esperar, los EE.UU. se subieron de manera inmediata a caballo de esta nueva y rentable franquicia comercial. Eso se debió a la intervención de Roy Lee, un abogado que había decido probar fortuna en Hollywood, quien compró los derechos para que el film de Nakata pudiera llegar a tener su versión norteamericana.

En el año 2002 fue estrenada La Llamada (The Ring), la cual fue dirigida por Gore Verbinski y estelarizada por Naomi Watts. La espeluznante imagen del fantasma de Sadako arrastrándose a través de la pantalla de un televisor caló hondo en la imaginería estadounidense, transformando a este film en un evento sumamente exitoso, debido sobre todo al desconocimiento del público sobre esas historias sobrenaturales.

Había nacido el J-Horror.

Al éxito de Ringu le siguió la no menos taquillera y terrorífica Ju-On: The Grudge (2003). Dirigida por Takashi Shimizu, esta producción nos narra la historia de un vengativo Onryō llamada Kayako, una mujer que fuera asesinada junto a su hijo Toshio, la cual va cobrando víctimas entre aquellos que se atreven a desentrañar el misterio que se esconde en la casa en donde se había producido la tragedia. Lo más espeluznante de todo ello es que la maldición, lejos de desaparecer, se propagaba de manera virulenta por toda la ciudad.

Nacida de un par de films que fueron directo al video, el mismísimo director realizó dos versiones cinematográficas en su país natal y dos versiones norteamericanizadas de dicha historia, las cuales fueron producidas por Sam Reimi y protagonizadas por Sarah Michelle Gellar (nuestra amada Buffy, la Cazavampiros).

Otras películas de fantasmas sedientos de nuestra existencia tomaron la posta de las producciones anteriormente nombradas, aunando los mitos y tradiciones con la modernidad de nuestro tecnificado siglo, entre las más conocidas podemos nombrar.

-Dark Water (Honogurai Mizu No Soko Kara-Hideo Nakata -2002-)

La misma cuenta la historia de una niña fantasma que habita en un edificio aquejado por extrañas manchas de humedad y escaleras inundadas. Una versión americana, interpretada por Jennifer Connelly y dirigida por Walter Salles, fue estrenada en 2005. Lamentablemente, la misma no se halla para nada a la altura de la original.

-Infección (Kansen-Masayuki Ochiai -2004)

Una suerte de virus telepático afecta a los integrantes de un hospital, los cuales comienzan a ver criaturas espectrales. Un auténtico delirio drogón que está basada en un episodio de una serie de terror llamada Yonimo Kimyō na Monogatari (Cuentos de lo Inusual).

-Kairo (2001)

¡Mamita querida! ¡Los fantasmas quieren acceder a nuestro mundo a través de Internet y yo que no guardé adecuadamente mis carpetas con pornografía! Este film, dirigido por Kiyoshi Kurosawa, tuvo también su versión yanqui que fue conocida como Latidos (Pulse Jim Sonzero-2006).

-La Llamada Perdida (Chakushin Ari-Takashi Miike-2003)

La historia gira alrededor de unos celulares malditos que te avisan (no se si por MSM o WhatsApp) que te vas a morir. Este film tuvo dos secuelas (2005-2006) y una versión norteamericana en 2008, que fue dirigida por Eric Valette.

-Sadako vs. Kayako (Kōji Shiraishi)

En un delirio de indudable naturaleza comercial, probablemente alimentado de otras sagas del mismo tenor como lo fueron Aliens/Depredador o Jason/Freddy, lo que un principio era una broma del día de los inocentes se transformó en una incuestionable realidad que se estreno en junio de este año. ¿De que va el asunto? para saberlo deberemos esperar a que (con mucha suerte) alguien se atreva a traerla a la Argentina... cosa que veo harto difícil.

Pálidos espectros de andar espasmódico, los cuales emiten sonidos estertorosos que hielan la sangre, nos acechan desde los oscuros rincones, esperando caer sobre nosotros para devorarnos… y eso si que da mucho miedo.

Tan solo me queda, como corolario de este artículo, recordar las sabias palabras del célebre director Akira Kurosawa que, en cierta ocasión, tuvo el infortunio de encontrarse frente a frente con uno de esos terribles fantasmas…

“¡Elkuko mecagho!”


NOTAS

1-Teatro Kabuki: teatro tradicional japonés caracterizado por la estilización y el uso de maquillajes elaborados en los actores. Su historia data del año 1603 con el nacimiento del Kabuki femenino por parte de una sirvienta de un templo shinto llamada Izumo no Okuni.

2-El color blanco es el símbolo de muerte en la cultura japonesa.


3-Confucianismo: también conocido como confucionismo, se trata de un conjunto de doctrinas morales y religiosas predicadas por los seguidores de Confucio, cuya influencia se ha extendido en casi todo oriente. Dichas prácticas giran en torno a la adoración de los antepasados y la creencia de la existencia de un alma que trasciende la forma mortal.


4- Ueda Akinari (1734-1809): prominente poeta y literato japonés, considerado como el Edgard A. Poe de oriente. Sus obras más importantes son Cuentos de Luz de Luna y Lluvia (Ugetsu Monogatari -1776) y Cuentos de Lluvia de Primavera (Harusame Monogatari-1809).


5- Lafcadio Hearn (1850-1904): famoso periodista, traductor, orientalista y escritor greco irlandés que hizo conocer la cultura japonesa en occidente. En 1890 se instaló en las islas niponas y finalmente obtuvo la ciudadanía. Ha sido conocido mayormente gracias a sus cuentos de fantasmas, destacándose Kwaidan: Stories and Studies of Strange Things (1903). 



ANEXO: DATOS TECNICOS DE FILMS J-HORROR

Como gran fanático de la data, algo que probablemente todos ustedes comparten, acá les va las fichas técnicas de las pelis que nombré más arriba. Espero sepan apreciar este sacrificio ya que me veré envuelto en la escritura de cientos de nombres llenos de muchas consonantes y vocales entremezcladas de manera caótica para el entendimiento de un mísero "Gaijin" como yo. De nada.

Tōkaidō Yotsuya Kaidan (1912-Nikkatsu/Sekaikan)

Dirección: Shôzô Makino.

Protagonistas: Matsunosuke Onoe.

Este film se perdió totalmente debido a los bombardeos producidos en tierras japonesas durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

Cuentos de la Luna Pálida (Ugetsu Monogatari-1953-Daiei Studios)

Producción: Masaichi Nagata

Dirección: Kenji Mizoguchi

Guión: Matsutarô Kawaguchi, Hisakasu Tsuji y Yoshikata Yoda (basado en una historia de Ueda Akinari)

Música: Fumio Hayasaka, Tamekichi Mochizuki e Ichirô Saitô

Fotografía: Kazuo Miyagawa

Protagonistas: Machi Kyô (Lady Wasaka), Mitsuko Mito (Ohama), Kinuyo Tanaka (Miyagi), Masayuki Mori (Genjurô), Eitarô Ozawa, Sugisaku Aoyama y Mitsusaburô Ramon.

Duración: 96 min.

Kwaidan: El Más Allá (Kwaidan-1964-Bungei/Ninjin Club/Toho Company/Toyo Kogyo Kabushiki Kaisha)

Dirección: Masaki Kobayashi

Producción: Takeshi Aikawa, Satoshi Kohinata, Minoru Tabata, Yoshishige Uchiyama y Shigeru Watatsuki.

Guión: Yôko Mizuki (basado en un relato de Lafcadio Hearn)

Música: Tôru Takemitsu.

Fotografía: Yoshio Miyajima.

Protagonistas: Michiyo Aratama, Misako Watanabe, Rentarô Mikuni, Kenjirô Ishiyama, Ranko Akagi, Fumie Kitahara, Tatsuya Nakadai, Keiko Kishi, Kin Sugai, Katsuo Nakamura, Tetsurô Tanba, Kan´emon Nakamura , Osamu Takizawa y Kappei Matsumoto.

Duración: 183 min.

Ringu (1998-Basara Pictures/Imagica/Asmik Ace Entertaintment/Kadokawa Shoten Publishing Co./Omega Project/Pony Canyon/Toho Company)

Dirección: Hideo Nakata

Producción: Masato Hara, Takashige Ichise, Makoto Ishihara, Tatsuya Isomura, Shin´ya Kawai y Takenori Sentô.

Guión: Hiroshi Takahashi (basado en la novela de Kôji Suzuki)

Música: Kenji Kawai.

Fotografía: Jun´ichirô Hayashi.

Efectos especiales: Hajime Matsumoto.

Protagonistas: Nanako Matsushima (Reiko Asakawa), Miki Nakatani (Mai Takano), Yûko Takeuchi (Tomoko Ôishi), Hitomi Satô (Masami), Rie Ino´o (Sadako Yamamura), Yôichi Numata, Yutaka Matsushige, Katsumi Muramatsu, Rikiya Ôtaka y Masako.

Duración: 96 min.

The Ring (2002-DreamWorks SKG/Parkes+MacDonald Image Nation/BenderSpink)

Dirección: Gore Verbinski.

Producción: Benita Allen, Neal Edelstein, Christine Iso, Roy Lee, Mike Macari, Laurie MacDonald, Walter F. Parkes, J. C. Spink y Michele Weisler.

Guión: Ehren Kruger (basado en la novela de Koji Suzuki y la adaptación cinematográfica de Hiroshi Takahashi).

Música: Hans Zimmer.

Fotografía: Bojan Bazelli.

Efectos especiales: Asylum VFX, Bischoff´s Taxidermy and Animal FX, Cinovation Studios, Matte World Digital, Method Studios, Pacific Title and Art Studio, Rhythm & Hues Studios y Tippett Studio.

Protagonistas: Naomi Watts (Rachel), Martin Henderson (Noah, David Dorfman (Aidan), Brian Cox (Richard Morgan), Jane Alexander (Dr. Grasnik), Daveigh Chase (Samara), Lindsay Frost, Amber Tamblyn y Rachael Bella.

Duración: 115 min.

Ju-On: The Grudge (2002-Pioneer LDC/Mikkatsu/Oz Company/Xanadeux)

Dirección: Takashi Shimizu.

Producción: Takashige Ichise, Kunio Kawakami, Yoshinori Kumazawa e Hiroki Numata.

Guión: Takashi Shimizu

Música: Shiro Sato.

Fotografía: Tokushô Kikumura.

Efectos especiales: Nippon Eizo Creative.

Protagonistas: Megumi Okina (Rika Nishina), Misaki Itô (Hitomi Tokunaga), Misa Uehara (Izumi Tôyama), Yui Ichikawa (Chiharu), Yuya Ozeki (Toshio), Takako Fuji (Kayako), Kanji Tsuda, Kayoko Shibata, Yukako Kukuri, Shuri Matsuda y Yôji Tanaka.

Duración: 92 min.


El Grito (The Grudge-2004-Columbia Pictures/Ghost House Pictures/Fellah Pictures/Senator International/Vertigo Entertianment)

Dirección: Takashi Shimizu.

Producción: Doug Davison, Joseph Drake, Satoshi Fukushima, Aubrey Henderson, Takashige Ichise, Nathan Kahane, Michael Kirk, Roy Lee, Carsten H. W. Lorenz, Ray Quinlan, Sam Reimi, Shintaro Shimosawa y Rob Tapert.

Guión: Stephen Susco y takashi Shimizu.

Música: Christopher Young.

Fotografía: Hideo Yamamoto.

Efectos especiales: Big X, Reality Check Studios, Pacific Title y Reality Check Studios.

Protagonistas: Sarah Michelle Gellar (Karen), Jason Behr (Doug), William Mapother (Matthew), Clea Duvall (Jennifer), Bill Pullman (Peter), Ted Raimi (Alex), Yuya Ozeki (Toshio), Takako Fuji (Kayako), KaDee Strickland y Grace Zabriskie.

Duración: 91 min. / 98 min. (versión extendida).

Dark Water (Honogurai Mizu No Soko Kara-2002-Kadokawa Shoten Publishing/Nippon Television Network/Video Audio Project/Nikkatsu/Officce Augusta Co. Ltd./Oz Company)

DirecciónHideo Nakata.

Producción: Takashige Ichise, Kyle Jones, John Ledford y Mark Williams.

Guión: Takashige Ichise, Hideo Nakata, Ken´ichi Suzuki y Yoshihiro Nakamura (Basado en la novela de Kôji Suzuki).

Música: Kenji Kawai y Shikao Suga.

Fotografía: Jun´ichirô Hayashi.

Efectos especiales: Nippon Effect Center.

Protagonistas: Hitomi Kuroki (Yoshimi Matsubara), Rio Kanno (Ikuko Matsubara), Mirei Oguchi (Mitsuko Kawai), Asami Mizukawa (Ikuko Hamada), Yu Tokui, Isao Yarsu y Shigemitsu Ogi.

Duración: 101 min.

Dark Water (2005-Touchstone Pictures/Pandemonium Productions/Vertigo Entertainment/Post No Bills Films)

Dirección: Walter Salles.

Producción: Doug Davison, Kerry Foster, Ashley Kramer, Roy lee, Bill Mechanic, Todd y Murata y Diana Pokorny.

Guión: Hideo Nakata, Takashige Ichise y Rafael Yglesias (basado en la novela de Kôji y Suzuki)

Música: Angelo Badalamenti.

Fotografía: Affonso Beato.

Efectos especiales: Digital Domain, Flash Film Works, Pacific Title Digital y Effects Group.

Protagonistas: Jennifer Connelly (Dahlia), John C. Reilly (Mr. Murray), Tim Roth (Jeff Platzer), Dougray Scott (Kyle), Pete Postlethwaite, Camrym Manheim, Ariel Gade y perla Haney-Jardine.

Duración: 105 min.

Infección (Kansen-2004-Aozora Investments/Entertainment Farm/Geneon Entertianment/Mikkatsu/Oz Company/Toho Company/Tokyo Broadcasting System)

Dirección: Masayuki Ochiai.

Producción: Kazuya Hamana, Takashige Ichise, Yukie Kito y Yasushi Kotani. 

Guión: Ryôichi Kimizuka y Masayuki Ochiai.

Música: Kuniaki Haishima.

Fotografía: Hatsuaki Masui.

Protagonistas: Michiko Hada (Dr. Nakazono), Mari Hoshino, Tae Kimura, Yôko Maki, Kaho MInami, Moro Morooka, Shîro Sano y Kôichi Satô.

Duración: 98 min.

Kairo (2001-Daiei Eiga/Hakuhodo/Imagica/Nippon Television Network)

Dirección y guión: Kiyoshi Kurosawa.

Producción: Ken Inoue, Seiji Okuda, Shun Shimizu, Atsuyuki Shimoda, Yasuyoshi Tokuma e Hiroshi Yamamoto.

Música: Takefumi Haketa.

Fotografía: Jun´ichirô Hayashi.

Efectos especiales: Links Digiworks.

Protagonistas: Haruhiko Katô (Ryosuke Kawashima), Kumiko Asô (Michi Kudo), Koyuki (Harue Karasawa), Kurume Arisaka (Junko Sasano), Masatoshi Matsuo, Shinji Takeda y Jun Fubuki.

Duración: 118 min.

Pulso (Pulse-2006-Weinstein Company/Distant Horizon/Neo Art & Logic)

Duración: Jim Sonzero.

Producción: Brian Cox, Michael Leahy, Stephen Maloney, jeff Maynard, Vlad Paunescu, Anant Singh, Ron Cosmo Vecchiarelli, Bob Weinstein y Harvey Weinstein.

Guión: Wes Craven y Ray Wright (basado en el guión de Kiyoshi Kurosawa).

Música: Elia Cmiral.

Fotografía: Mark Plummer.

Efectos especiales: Two Hours in the Dark, Neo Digital Imaging, Light Dog Films, Live Wire Productions & Visual FX, Engine Room, C-TRL Labs, I.C.O. Entertainment y Orphanage.

Protagonistas: Kristen Bell (Mattie), Ian Somerhalder (Dexter), Christina Milian (Isabelle Fuentes), Rick Gonzalez, Jonathan Tucker, Samm Levine, Octavia Spencer y Ron Rifkin.

Duración: 90 min.

Una Llamada Perdida (Chakushin Ari-2003-Kadokawa-Daiei Eiga K.K.)

Dirección: Takashi Miike.

Producción: Yoichi Arishige, Fumio Inoue, Kazuo Kuroi, Hiroshi Okawa, Naoki Satô y John Sirabella.

Guión: Yasushi Akimoto, Minako Daira y Alexander Von David.

Música: Kôji Endô.

Fotografía: Hideo Yamamoto.

Efectos especiales: OLM Digital.

Protagonistas: Ko Shibasaki (Yumi Nakamura), Shi´ichi Tsutsumi (Hiroshi Yamashita), Kazue Fukiishi (Natsumi Konishi), Anna Nagata (Yoko Okazaki), Atsushi Ida (Kenji Kawai), Mariko Tsutsui (Marie Mizunuma), Kumiko Imai y Keiko Tomita.

Duración: 112 min.

Llamada Perdida (One Missed Call-2008-Alcon Entertainment/Missed Call Productions/Kadokawa Pictures)

Dirección: Eric Valette.

Producción: Timothy M. Bourne, Shinya Egawa, Alison Haskovec, Manfred D. Heid, Broderick Johnson, Avram "Butch" Kaplan, Gerd Koechlin, Andrew A. Kosove, Scott Kroof, Elizabeth Kushman, Josef Lautenschlager, Jennie Lew Tugend, Martin Schuermann, Andreas Thiesmeyer, Steven P. Wegner y Lauren Weissman.

Guión: Andrew Klavan, Yasushi Akimoto y Minako Daira.

Música: Reinhold Heil y Johnny Klimek.

Fotografía: Glen MacPherson.

Efectos especiales: Spectral Motion, Zoic Studios y Pacific Title and Art Studio.

Protagonistas: Shannyn Sossamon (Beth Raymond), Edward Burns (Detective  Jack Andrews), Ana Claudia Talancón (Taylor Anthony), Ray Wise (Ted Summer), Azura Skye, Johnny Lewis, Jason Beghe y Margaret Cho.

Duración: 87 min.

Sadako vs. Kayako (2016-Kadokawa/NBCUniversal Entertainment)

Dirección: Kôjo Shiraishi.

Guión: Takashi Shimizu y Kôji Suzuki.

Música: Kôji Endô

Protagonistas: Mizuki Yamamoto (Yuri Kurahashi), Tina Tamashiro (Susuka Takagi), Aimi Satsukawa (Natsumi), Misato Tanaka (Akayo Takagi), Masahiro Kômoto (Shinichi Morishige), Rina Endo (Kayako Saeki), Elly Nanami (Sadako Yamamura), Rintaro Shibamoto (Toshio Saeki), Masanobu Andô y Maiko Kikuchi.

Duración: 98 min.
"UNA DE ESTAS NOCHES NOS VEMOS"